Pirámide de la Luna |
En mi opinión personal, es un lugar muy especial, con una gran energía perceptible para cualquiera, eso sí, hay que caminar bastante para poder llegar a cada pirámide, subirlas y apreciar las vistas formidables desde cada una de ellas.
Uno termina agotado, pero vale totalmente la pena la visita, además de poder comprar artesanías u objetos alusivos a la época de esplendor de éste mágico lugar.
A los alrededores de la zona arqueológica se encuentran diversos lugares para comer muy sabroso y de todo tipo de precios. Te aseguro que desearás regresar otra vez.
Como recomendación es mejor llevar ropa cómoda y fresca, alguna gorra, protector solar y muchísima agua para hidratarse.
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